¿Por qué asegurar el contenido?
Todos necesitamos un seguro de hogar, porque tanto nuestra vivienda como su contenido son bienes muy preciados y, en muchos casos, con gran valor sentimental. Por eso es tan importante contratar un seguro de hogar que te proteja de imprevistos desagradables como robos, incendios, inundaciones, etc. Valorar correctamente el contenido de la vivienda es muy importante para ahorrarte problemas si tienes que recibir una indemnización.
¿Qué es el continente?
A la hora de contratar seguro de hogar es crucial distinguir entre continente y contenido para valorar nuestras posesiones. Se considera continente a las partes de la vivienda que no son móviles (paredes, techos, suelo), incluyendo todas las instalaciones fijas, como las de agua, electricidad o gas. En este apartado hay que contar también con elementos como las persianas y los toldos exteriores, las molduras, componentes añadidos al suelo (parqué o moqueta), los garajes, las piscinas, etc. Para valorar y asegurar el continente suele ser suficiente con indicar el número de habitaciones de la casa y los metros cuadrados disponibles.
¿Qué se considera contenido?
El contenido de nuestra vivienda abarca todos los bienes que se encuentran en su interior y que no forman parte del edificio como tal (continente). En este apartado se incluyen:
- Muebles, alfombras, cuadros, lámparas, cortinas, espejos, adornos y demás.
- Electrodomésticos, ordenador, televisión, equipo de música, etc.
- Ropa, mantas, sábanas y todos los objetos de uso personal como joyas y otros objetos de valor.
En general, están incluidos todos los bienes de uso habitual y que han sido adquiridos por los habitantes de la vivienda.
Valorar el contenido
Para calcular el valor del contenido hay que tener en cuenta todos los elementos que se consideran contenido y asignarles un precio de acuerdo con el valor actual de mercado, es decir, lo que te costaría reponerlos en caso de pérdida. Es conveniente realizar esta tarea habitación por habitación para obtener así una lista clara y sin que se olvide ningún contenido.
¿Qué ocurre con los objetos de valor?
Los objetos de valor como joyas, colecciones privadas, cuadros y demás, para los que es difícil establecer un valor de mercado, suelen recibir un tratamiento especial, con un límite máximo de indemnización. También se tienen en cuenta las medidas de seguridad con que cuenta la vivienda, como alarmas o caja fuerte.
Fuente: Diarioinformacion