Farmacias de guardia de la provincia de Alicante.
Texto:
Tradición y fe marcan el final de las Fiestas Mayores alfasinas con la multitudinaria procesión que honra al Santísimo Cristo del Buen Acierto. La talla, bajada un día antes tras la procesión del Santísimo Sacramento, parte sobre las 20 horas de la iglesia de San José precedida de la xirimita, el tabalet, los monaguillos y las reinas Mayor e Infantil.
Detrás de ellos va la niña que hara de ángel en la embajada al final de la marcha. Y tras ésta, el párroco local, escoltando la talla, además de las autoridades de la Corporación alfasina, representantes de los Cuerpos de Seguridad locales, Guardia Civil y el alcalde. Junto a todos ellos, avanzando con devoción, van los fieles portando cirios blancos encendidos que van marcando el camino de la comitiva.
Cerca de hora y media después termina la procesión en la emblemática plaza del Pino, donde una vez más una niña recitaría la embajada, el poema de agradecimiento que recuerda cómo llegó la venerada talla del Cristo del Buen Acierto a l'Alfàs del Pi, desde el convento valenciano del Remedio, donde se llamó primero "Cristo del Consuelo", cambiado cuando llegó al pueblo tras librarse de un incendio en un motín callejero.