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En condiciones normales, cuando las personas duermen, la via aerea esta permeable, es decir, pueden respirar con tranquilidad. |
Qué esLa apnea obstructiva del sueño es una patología respiratoria que se caracteriza porque las personas que lo padecen roncan habitualmente, tienen paradas de la respiración (apneas) de forma repetida y somnolencia durante el día. Como consecuencia, los pacientes que la padecen no pueden descansar bien durante las horas de sueño. “Lo que ocurre con las personas que tienen apnea del sueño es que durante la noche tienen un colapso de la faringe. Este colapso es periódico, especialmente en algunas fases del sueño (como el REM)”, explica a CuidatePlus Eusebi Chiner, neumólogo y coordinador de SeparPacientes, de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ). “Cuando el número de apneas excede determinado número por hora se da el síndrome conocido como apnea obstructiva del sueño”. CausasEn condiciones normales, cuando las personas duermen, la vía aérea está permeable, es decir, pueden respirar con tranquilidad. Sin embargo, en algunas fases del sueño los tejidos se cierran y bloquean la vía respiratoria causando la apnea. Además de esta causa existen otros factores que pueden aumentar el riesgo de tener apnea:
SíntomasLos ronquidos son la manifestación más visible que puede alertar al paciente sobre la posibilidad de tener apnea del sueño. Las personas que padecen la enfermedad normalmente empiezan a roncar muy fuerte después de quedarse dormidos. Además, éste se interrumpe durante un periodo de silencio mientras el paciente sufre una apnea. Ese periodo de silencio va seguido de un resoplido con jadeo mientras el paciente intenta volver a respirar. Como consecuencia de los episodios, el sueño del paciente no es reparador y aparece somnolencia diurna, presencia de fatiga crónica e incluso alteraciones respiratorias y cardiovasculares. La persona con apnea suele levantarse con frecuencia para ir al baño, se despierta frecuentemente con la boca seca y al día siguiente nota cansancio, dolor de cabeza y se queja de la alta probabilidad de dormirse en situaciones inapropiadas, mientras conduce, lee o asiste a reuniones de trabajo. Además, los pacientes con apnea pueden tener depresión, hinchazón de piernas o ser hiperactivos. PrevenciónLa apnea del sueño va ligada a ciertos factores como el aumento del tejido de las amígdalas en niños y la obesidad en los adultos. De hecho, según apuntan desde Separ Pacientes, el 80 por ciento de los pacientes con apnea del sueño son obesos. Por este motivo, la principal medida que puede ayudar a prevenir la apnea es perder peso, así como aplicar determinadas medidas higiénico-dietéticas, el ejercicio físico, etc. Por otro lado, dejar de fuma y evitar el consumo de alcohol también ayudan a prevenir la aparición de la enfermedad. Cuando ya hay síntomas (ronquidos y apneas referidas por la pareja) el paciente debe acudir al médico para confirmar el diagnóstico. TiposEl índice de apnea e hipopnea, es decir, cuántas veces tenemos cada hora, a lo largo de la noche, paradas respiratorias de un tiempo superior a 10 segundos, marcará los tipos de apnea del sueño que pueden dividirse en:
Perder peso, dejar de fumar y evitar el consumo de alcohol puede mejorar el pronóstico del paciente con apnea del sueño. DiagnósticoEl diagnóstico se hace realizando una prueba de sueño que puede ser completa, incluye variables neurológicas y respiratorias, denominada polisomnografía o también puede diagnosticarse con pruebas más abreviadas, como la poligrafía respiratoria, que incluye sólo variables respiratorias y puede realizarse en el hospital o en el domicilio. Con estas pruebas los médicos establecerán el índice de apnea e hipopnea que indicará la gravedad del síndrome. Hay un grupo de pacientes donde el diagnóstico es más complicado debido a que, aunque presentan muchas apneas referidas y ronquidos, no tienen somnolencia diurna. Este caso se suele dar en pacientes jóvenes y los últimos estudios españoles que se han realizado avalan que en estos pacientes el tratamiento es importante porque si no, a la larga podrían desarrollar patologías como hipertensión u otras patologías cardiovasculares. “Estos son los casos más complicados de diagnosticar porque vienen alertados por el acompañante, no por la sintomatología durante el día. A veces debutan por una patología como cardiopatía isquémica, infarto agudo de miocardio o incluso un ictus cerebral y lo que traduce es que en el fondo había una apnea que no estaba previamente diagnosticada”, apostilla Chiner. TratamientosLa terapia para la apnea del sueño no es curativa. Está dirigida a aliviar lo síntomas. Existen varios tipos de tratamientos que se aplican en función de la gravedad:
Otros datosEpidemiologíaGlobalmente es más frecuente en hombres que en mujeres. Sin embargo, Chiner apunta que a partir de una cierta edad, especialmente durante la menopausia la frecuencia de esta patología en mujeres tiende a igualarse con la de los hombres. En los adultos la frecuencia se encuentra en torno al 25 por ciento en edades avanzadas (60 a 80 años). En edades medias, la franja más frecuente en varones, tendríamos alrededor de un 10 por ciento de personas que podrían padecer apnea del sueño. La apnea obstructiva del sueño también es frecuente en niños. De hecho, desde SeparPacientes estiman que alrededor del 3 por ciento de los niños padecen una apnea del sueño. En estos casos, la mayoría de las veces está relacionada con tener amígdalas hipertróficas, es decir, con un aumento de las anginas. En el caso de los niños hay factores que pueden predisponer a tener apnea del sueño: algunas alteraciones de los maxilares, determinadas enfermedades y la obesidad infantil. Por último, esta patología también puede afectar a bebés, aunque es menos frecuente que los recién nacidos tengan amígdalas hipertróficas. En estos infantes el cuadro clínico que se da es de atresia de coanas, que puede ser que sea muy estrecha de nacimiento y cause la apnea del sueño. ComplicacionesEl síndrome de apnea obstructiva del sueño puede ocasionar diversas complicaciones entre las personas que lo sufren. La hipertensión arterial está presente en el 50 por ciento de los pacientes y es frecuente la aparición de arritmias durante el sueño. También aumenta el riesgo de sufrir accidentes cardio y cerebrovasculares, como el ictus y el infarto de miocardio. Asimismo, la somnolencia diurna está involucrada en un mayor riesgo de sufrir accidentes de tráfico o laborales, y también es común la impotencia y disminución de la libido entre estos pacientes. Fuente: Cuidateplus |