Farmacias de guardia de la provincia de Alicante.
En una cazuela, se pone agua —algo más de un litro— y, cuando rompa a hervir, se añaden sopas de pan ligeramente tostadas en el horno. Aparte, se cortan los ajos en trozos regulares y se fríen en una sartén con un poco de aceite.
Cuando comiencen a dorar se añade una cucharada no muy grande de pimentón, dulce o picante, según los gustos.
Este sofrito se incorpora a las sopas, se sazona con sal y se deja cocer despacio durante una hora aproximadamente.